Hay quien, aprovechando la tradición de estrenar ropa el domingo de Ramos, marca tendencia en la moda primavera verano.
-Camisetina de picu asomando la mata pelo…
-Ahí.
-…Pantalonín caídu luciendo la goma del calconzillu…
-¡Ahí, ahí!
-…Gafes de pasta.
-¿No son metáliques ho?
-Ye igual, pero costáronme una pasta.
-Ah. ¿Y en los pies qué lleves ho?
-Chanclos, a mediu caminu entre la madreña y el zapatu deportivu.
-¿Y sin calcetos, Ramonín?
-El calcetu úsolu de funda pal teléfono móvil. ¿Qué te paez?
-Yo véote un puquiñín costreñíu.
-¡Pa lucir hay que sufrir, Ricardo!
-Ya, pero pa andar por la huerta…
-Así lo mismo te garro un martini que una fesoria.
-Tas dejándome acojonau.
-Tá mal que yo lo diga, pero soy el gentleman de los praos.
-¿Y estrenástelo ayer to?
-Home, claro. El domingo de Ramos, quien no estrena no tien manos.
-Vaya cambiazu que pegaste, gallu.
-Digo: voy reinventame a mí mismu, ¿oíste?
-No yes tú ni tu sombra.
-Ahora practico el dandismo, Ricardo.
-¿El qué ho?
-Llevo gayumbos azul noche por si me sal algo…
-Qué finu yes, cabrón.
-Tengo apreciu a lo bello, o bella.
-¡Oveya seráslo tú!
-¿Ves? Contigo nun me pueo comunicar, nun tás preparau.
-¿Pa qué ho?
-Pa lo que ye el arte de vestir, Ricardín. Sólo te falta la albarda…
-Ando arreglau pero informal. Sobre to, pa dir a segar.
-¡Audacia cromática, Richar! Eso ye lo que te falta.
-¿El qué ho?
-Teníes que usar colores arriesgaos, como el malva.
-¿El malva?
-Sí ho. Y del fucsia al amarillu, del azul eléctricu al verde loro…
-¡Gontumadre, Ramón! ¡Tú tás varilla!
-Voy un pasu por delante, chico.
-¿Fumaste algo?
-Lo que no soporto ye el gregarismo, ¿qué quies que te diga?
-Teníes que dejar les drogues blandes, Ramón.
-Lo que amo ye la belleza.
-Pues a mí lo que más me jode son los zapatos de cordones.
-Reconozco que tienes un refinamientu innatu porque yes de Moreda.
-Ahí, Ramón. Les coses como son.
-Pero véote con un look muy xateru, ¿sabes cómo te digo?
-¿Qué quiés? Tejidos nobles, bombachos impecables…
-Voy ponéte a la moda, Ricardín.
-¿A mí ho?
-Sí, voy dejate igual que Obama pero sin primera dama.
-¡Ni falta, dandy! ¿Qué ye, que no tá buena la mi Encarna?
-Home, si tuviera mala, taba en la cama.