Relaciones a distancia
-Lo que yo te diga, ¿oíste?
-Sí ho.
-Hazme casu, la distancia reaviva la pasión.
-Anda, calla.
-Eso sí, hai que respetar les hores, ye como la digestión.
-¿Qué hores ho? ¿A ti paezte normal venir a la playa con ordenador?
-La hora del Skype ye sagrá. ¡La mi muyer ya ta conectá!
-¿Cómo ye ho?
-Gracies a la tecnología pueo vei la cara en cualquier momento.
-Meca, buena gana tienes…
-¿Tú sabes lo que ye tar juntos y a tantos kilómetros de distancia?
-¡Cagonrós! Eso firmábalo yo.
-Imagínate que se mudara la tu muyer.
-¿Qué la tas, llamando gocha?
-¡A otra ciudad, joder!
-Ah.
-Imagínate que marcha, por cuestiones de trabayu, a vivir a Moscú.
-Habiendo Alsa…
-Qué antiguo yes, ¡yo a la mía conocila en un sitiu web!
-Meca. Y luego, ¿qué?
-Na. Nos ficimos amigos en Facebook, charlamos por Whatsapp, declareme con el Skype y tuvimos mucha relación a través de Viber.
-Coño, pues al pasu que vas…
-¿Qué?
-Cásate en Twitter, compra los fíos en Amazon y que los envíen por Paypal.
-¿Cómo yes tan faltosu ho?
-Faltosu yes tú, que pa venir a date un bañu en Bañugues traes más aparatos que la NASA.
-La hora del Skype ye sagrá. ¡La mi muyer ya ta conectá!
-Ni que tuviera en la otra punta del planeta, ¿oíste?
-Benavente ye otru mundo y yo échola de menos, necesito piropeala, avivar el deseo…
-¡Tas como una puta cabra!
-¿Tú sabes cuántes persones tarán ahora demostrando su amor en la distancia?
-¡Pues tamos cojonudos! ¡Ahora ni Blas quier cortejar!
-¿Qué qué ho?
-Todiós agarra el móvil ¿Y sabes pa qué? ¡pa atajar!
-La distancia impide el abrazu pero no impide el sentimientu.
-¿Qué sentimientu ni qué mi madre? ¡Acabose lo que ye’l romance!
-¿Por?
-No sabemos comunicanos sin un teclao. ¡Tamos como cebollinos!
-Habla por ti.
-¡Con la pila muyeres que hai en la playa y tú mirando pa una pantalla!
-La hora del Skype ye sagrá. ¡La mi muyer ya ta conectá!
-¡Pues vete pa Benavente, carapijo! ¡Vete a cortejar!
-Qué antiguo yes, de verdá.
-Contacto visual, cortejo y apareamiento.
-¿Qué qué ho?
-Ahora, se jodió. Con tantos adelantos, vamos p’atrás. Acabarán los emoticonos reemplazando a los besos de verdá.
-¡Chisst, calla, que me generas inseguridad!
-¿Por?
-¿Quiés callar? ¡¡¡La mi muyer ya ta conectá!!!