“Ecoansiedad”
01/10/2019
Manolín Mansplaining
15/10/2019
Show all

Estrés infantil, ansiedad familiar.

-¡Venga, nena, vengaa! Bañu, cena, unos cuentos y a dormir.

-Déjala, ho.

-¿Qué?

-¿Nun ves qué carina tién?

-¡Vengaaaa!

-Tién la agenda más apretá que Barbón.

-Calla ho.

-¡Ta estresá!

-Yo sí que toi estresá, no empecemos ya. 

-Normal, Lili, normal. Tamos toos igual, en pleno estrés familiar.

-¿Que qué, ho?

-Lleva en pié desde las siete la mañana. Lunes y miércoles, danza; los jueves, piano; el martes, francés… Y ahora vienes con informática y ajedrez…

-Mejor en casa jugando a la Play, claro que sí…

-No ye eso, Lili, no ye eso.

-¿Cómo que no?

-La cría ta sobrepasá, ¿no la ves?

-Ya ta hablao, Josiantonio, que tenga lo que nosotros nun pudimos tener.

-Hai que dejala más libre, muyer.

-¿Libre pa qué, ho?

-Pa que pueda gestionar su tiempo, no sé.

-O sea, na.

-¿Qué?

-Si ye por ella, Jose, nun va facer na.

-Ta en su derecho, coime, ye una guaja.

-¡¡¡Tien que tar bien educá!!!

-Probe. Nun tién tiempu ni pa jugar.

-Bah.

-¿Cómo que va? 

-Lo que necesita son habilidades, conocimientos pa llegar lejos en la vida.

-¡Para un poco, Lili! ¡Esto paez crianza intensiva!

-¿Que qué, ho?

-Tamos ansiosos, ¿no lo ves? ¡Tanto ella como nosotros!

-¿Qué dices, Josiantonio?

-La cría teme no cumplir nuestros objetivos y nosotros que no sea perfecta.

-No flipes, Jose, no flipes.

-Tamos exigiendo mucho, Lili, y ye una cría. Luego va crecer y ye peor.

-¿Peor? ¿Cómo que peor?

-Será una adolescente ansiosa y vete a saber…

-¡Haz el favor, eh! ¡Haz el favor!

-Queremos que con 8 años sepa tres idiomas, baile como la Pavlova, cante, sea campeona de ajedrez y toque bien el piano… 

-Lo que nun supimos facer ni tú ni yo.

-Claro, tamos proyectando en ella nuestra frustración.

-¡Déjame de rollos, eh! Toi cansá tol día de trabayar y…

-Y ella, y yo, y… 

-¿Que qué, ho?

-Vivimos obsesionaos con llenar las horas.  

-Que me hablen a mí de conciliación… ¡Ja!

-Relaja, Lili, despacín…

-¡Venga, nena, vengaa! Bañu, cena, unos cuentos, y a dormir.

Comentarios

comentarios