-No te va a llamar.
-Que sí, ya verás.
-5 de septiembre, chaval, deja ya de flipar.
-¿Por?
-Pasa página, no seas bobu.
-Ye mui fácil decilo.
-Apúntate al gym, pilla unos fascículos, vuelve a la realidá.
-¿Eh?
-La vida no ye un anunciu de Estrella Damm.
-Ella díjome que lo nuestro diba ser pa siempre.
-Ya, pero en verano too ye relativo…
-Hicimos juntos la conga, recorrimos media verbena.
-Ay, les fiestes de prau… Pierde unu la cabeza.
-Y ahora, duelme la mano de tanto pensar en ella.
-Qué gochu yes. Vas quedar ciegu.
-¡Calla ho! ¡Duelme la mano, porque nun paro d’escribir!
-Ah.
-Dejome huella, Cholo, nunca vi una muyer así.
-¿A quién se y-ocurre liase con una turista?
-¿Por?
-Ye visto y no visto, como la Vuelta Ciclista.
-Ya, pero…
-Luego, lleguen a Madrí y nun s’acuerden de ti.
-Quedó en llamar.
-¿Y nun sabes na d’ella?
-Flipó con Asturias, compró un llaveru y una madreña.
-Eso ye lo guapo, que vengan a facer gastu.
-¡Cagonrós! Cerramos el mejor verano turísticu de la historia y acabamos solos y agarraos a la fesoria.
-Ye lo que hai.
-Si tuvieramos más labia…
-Que te quiten lo bailao, ¿oíste? ¡La pena ye que no te tocó el piqui piqui!
-Mucho mirar pal paisaje pero el paisanaje qué ho.
-Dígotelo yo. ¿Quiés un kleenex?
-Na, deja, tengo que superar la conga como sea.
-¿Vas a andar sorbiendo mocos a escondíes?
-Ella quedó en llamar, dijo que me amaba.
-La gente revolucionase en verano y suelten pijaes con un mojito en la mano.
-Fue algo tan…
-Hormonal. No y-des más vueltes.
-Sí ho.
-Pillote la conga en el momento justu y el sitiu indicau.
-¿Tu sabes cómo la extraño?
-Sentimental yes, daslo too y nun pué ser. ¿Echasla mucho de menos?
-Dos veces: de día y de noche.
-Probe. Anda, vete pa la cama, pa eso se inventaron las almohadas.
-¿Pa qué ho?
-P’abrazar amores imposibles.
-Mucho mirar pal paisaje pero el paisanaje qué ho.
-¡Tranquilu ho, ella de lo malo llevó un souvenir!
-¿Y?
-Cuando mire el llaveru y la madreña acuérdase de ti.