-¡Tamos arreglaos!
-Dímelo a mí.
-No acabo de recuperame del Alcorconazu…
-Ya.
-Y ahora, ¡un gatillazu!
-La culpa tienesla tú.
-¿Yo?
-Sí, que vas provocando con eses bragues de algodón.
-Bien guapes que son, ¿enséñoteles por detrás?
-Deja, que igual aparez Kaká.
-Y yo que pensé que te iba a motivar…
-Sí ho.
-Digo: en cuanto vea esti cuerpón se me va a declarar.
-Los cojones.
-¿Qué?
-Nun pienso facer declaraciones.
-¿Pero tantes molesties te causa?
-¡Ay, Rosa, esto ye mucho peor que una pubalgia!
-Jolín, trajéronme los Reyes esti conjuntín y…
-¿Tú sabes lo que ye pa mí topame de frente con esi escudo?
-¿Tan culé yes, ho?
-Llevo tola primera vuelta mirándolu pol retrovisor…
-¡Vuelve a la cama, Jose Carlos, fai el favor!
-Hasta que nun vayas a les rebajes…
-¿Yo?
-Sí, por una segunda equipación.
-¿Pero vas dejame así, ho?
-Con esi emblema ahí, nun pueo rendir, Rosina.
-¿Vamos dejar que el merchandising acabe con lo nuestro?
-¡Menudu shock, duelme hasta el aductor!
-Empeñástete en desnudame a mordiscos y…
-¿Quién diba a pensar que guardabes esa sorpresa en el interior?
-Avisete, Josín.
-¿A mí?
-Sí, morbosón, ¿no queríes ver el merengue en mi piel?
-Pero esi merengue no. Cómo iba yo a imaginar…
-Venga, jugón, ¡vente arriba!
-Que no, Rosa, que yo no soy Arturo el de Gran Hermano.
-¿Por?
-Yo tengo unos valores, sentimientos…
-Entós, ¡abandona la casa!
-¿Qué ho?
-¡Que te pires!, ¡hala, expulsau!
-Cagonrros, aquí magnifícase to.
-Esa soberbia…
-¡Vikinga, dísteme un golpe baju!
-¡Hala, polaco, a chupar del villarato!
-Tanta lencería… ¡Vais pasar otru añu en blanco!
-¡Qué chascu contigo, Jose Carlos!
-Pues anda que yo…
-¿Dejasme poneme un ratín enrriba?
-Que no, lo que quies ye asaltar el liderato.
-Tas obsesianau, así nun facemos ná. Qué asco, por favor.
-Nun yes mala moza, Rosina. Pero con esi interior…