Los hombres obesos aguantan más haciendo el amor
-Come, Hilario, ¡¡¡come!!!
-Pero Mari…
-¡Menos pilates y más panceta! ¿Oíste?
-Que no m’apetez ho…
-¡Y cuando acabes eso tráigote una caja donuts!
-¿Pero esi cuentu ónde salió?
-¡En la prensa, en la tele! ¡No se habla de otra cosa ho!
-Pijaes.
-Tú, claro, como yes el espíritu de la contradicción…
-¿Yo?
-Tola vida en la playa metiendo barriga, ¡y ahora, mira!
-¿A ti paezte normal cebame a estes hores como si fuera un gochín?
-Ay, si ganáramos algo de tiempu, ¡aunque fuera un minutín!
-¿Pero qué dices? ¡Si yo en la cama pueo aguantar hores y hores…!
-Sí. ¡Durmiendo, Hilario, durmiendo!
-Bueno, oye…
-¡Come, Hilario! ¡Tú come!
-¿No ves que nun soi d’engordar?
-¡Fáltate grasa! Y como te vea hacer abdominales, ¡échote de casa!
-Vaya ho.
-No sé de qué te val ir a clase de zumba, la verdá.
-Quemo calorías, Marisa, libero tensiones…
-¡Hilario, no me toques los cojo…!
-¿Qué ye ho?
-Mucho gym, y cuando creo que vas a empezar acabaste ya.
-¿Qué dices, Marisa?
-Yes más rápidu que inmediatamente.
-¿Qué qué ho?
-Ay, fiu, a ver si con un poco de sobrepesu te sube la pasión.
-Pijaes.
-¿De qué te sirven los musculinos, Hilarín?
-¿Y a ti los michelines?
-¿Pero tú vísteme bien ho?
-¿Por?
-En esti octubre caribeño y yo, aquí, en traje de Eva…
-Pues podías habelo planchao un poco.
-¡Faltosu!
-No voi a comer más, Marisa.
-Mira, vida, prefiero un amante grasientu que…
-¡Pues líate con Homer Simpson!
-¿Qué?
-Esi estudio sobre la masa corporal y el rendimientu sexual ye un camelo.
-Díjolo Blas.
-¡Dizlo tol mundo, Mari! ¡Yo toi bien como toi! ¡Finín, finín!
-Necesites ganar unos kilos, Hilario, bien repartíos…
-¿Qué pienses, que soi de Bankia?
-Oye, si con un pelín de obesidá, aguantes unos minutinos más…
-Y pensar que eras tú la que quería adelgazar…
-¡No señor!
-¿Cómo que no? ¿Qué me dijiste namás conocenos?
-Llámome Marisa y soi de Rubens.
-¡De Rioturbio, dijiste de Rioturbio!
-Y bien orgullosa que toi de mi cuerpo, ¿oíste?
-¡Y yo del míu! Si voi al gym ye pa poneme como un toro. Sólo me falta…
-¡Los cuernos!
-¿Qué qué ho?
-Ye lo único que te falta, Hilario. O vas dejando barriga o…
-Marisa, Marisina…
-¿Qué quies que te diga?